El chip en las vacas plantea una nueva incógnita para el sector agropecuario
Desde Carbap se lanzó el alerta porque la iniciativa "no se condice con las exigencias" de los mercados. José Ortiz, titular de la Sociedad Rural de Olavarría, afirmó que hoy "todos los elementos de seguimiento del ganado ya los tiene el Senasa".
 
Mientras comienza la cuenta regresiva para la implementación del Sistema Fiscal de Trazabilidad Animal (Sifta), prevista para el 1 de enero de 2015 y que demandará la colocación de un chip en cada ejemplar de ganado bovino nacido en la Argentina para su seguimiento, desde el sector agropecuario persisten las dudas acerca de sus alcances y, por el momento, se lo avizora más "como un nuevo gasto que como una inversión".

En efecto, la resolución general Nº 3649 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), publicada en el Boletín Oficial el 14 de julio de este año, anuncia en su artículo octavo que esa dependencia "definirá oportunamente todos aquellos aspectos complementarios y necesarios para la operatividad del sistema que se implementa por la presente", cuestión que debería ser concretada en los próximos 90 días y que provoca cierto grado de preocupación debido al costo del nuevo sistema, según alertó Carbap en los últimos días.

En nuestra ciudad, José María Ortiz, titular de la Sociedad Rural de Olavarría (SRO), consideró que en la actualidad la AFIP ya cuenta con "todos los elementos" necesarios para instrumentar el seguimiento del ganado bovino y cuestionó que todavía no se haya reglamentado porque existen "diferentes sistemas" con "distinto costo" para el productor.

Mediante un comunicado, Carbap (Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa) destacó que dicha resolución general "no se condice con las exigencias de los mercados demandantes de nuestros productos" y que "el dispositivo electrónico implementado por AFIP no agrega beneficio alguno, tanto en lo atinente a trazabilidad como a la posibilidad de control fiscal, y sí acarrea en cambio un costo escandaloso para el productor y los frigoríficos, quedando sólo el beneficio económico para los fabricantes, intermediarios y vendedores del mismo".

En ese sentido, Mario Carpi, titular del Colegio de Veterinarios bonaerense, aclaró que "lo del microchip es una noticia que salió hace un tiempo. Ahora está en marcha la ‘caravana’, un sistema que ha impuesto el Senasa, que es una trazabilidad para la cuestión sanitaria, y ahora la AFIP está tratando de implementar este sistema de chipeo individual que va a servir para identificar a los animales, a diferencia de lo que es la caravana ahora, que es un seguimiento biológico".

La trazabilidad

Al respecto, Ortiz planteó que "hay una cosa muy clara, que la famosa trazabilidad que busca la AFIP hoy la tiene especialmente marcada y seguida el Senasa; ahí están todos los elementos técnicos que aseguran la trazabilidad de la hacienda en cualquier lugar de la Argentina con el servicio de Sanidad del Senasa".

El dirigente adhirió a los lineamientos de la entidad madre y subrayó que "indudablemente la Rural de Olavarría es parte de Carbap y se avala totalmente el comunicado. Es cierto que los elementos que tiene hoy Senasa con el seguimiento desde el nacimiento del ternero hasta la pasada por el frigorífico del animal cuando ya está producido, con eso está claro: es algo que se podría modificar alguna cosa porque todo es perfectible".

Sin embargo, los cuestionamientos del presidente de la SRO apuntan al grado de imprevisibilidad con que se lanza el sistema, ya que "a esa resolución general de la AFIP todavía nadie tiene en claro cómo se va a implementar, ni siquiera en el Senasa: no hay seguridad ni concretamente se sabe qué sistema van a usar. O sea que la medida todavía es una gran incógnita desde el punto de vista de su implementación".

En concreto, el dirigente opinó que "es una resolución general que no define qué sistema se va a emplear, porque hay varios sistemas para hacer seguimiento con un chip que son diferentes y también en su costo, pero hasta el momento nadie tiene en claro cómo es y cómo se va a poner en marcha ni cómo se va a aplicar", sostuvo.

Ortiz consideró que con las caravanas "hoy se sabe cuáles son los establecimientos que producen carnes para exportación y de ahí para abajo Senasa da todos los elementos técnicos para asegurar la trazabilidad". De ese modo, "no hay ninguna duda que en este momento para el sector lo del chip es más un gasto que una inversión y también una complicación porque nadie sabe cómo se va a implementar ni cuál es el fin porque la trazabilidad hoy la tienen".

En conclusión, en la actualidad "no hace falta nada más y con esos datos también pueden hacer control tributario porque ahí están esos elementos. Es muy claro, hoy si la AFIP quiere tiene todos los elementos para hacer el seguimiento en el Senasa", finalizó.